La Fundación Arranz-Bravo acoge una exposición del artista con obras del fondo de arte del publicista Lluís Bassat. Es una de las colecciones más importantes de la obra del pintor en España, con más de 50 piezas entre pinturas, esculturas y obras sobre papel. El fondo representa la trayectoria artística de Eduard Arranz-Bravo, desde su inicio, a final de los años sesenta, hasta la obra contemporánea.
La colección de Lluís Bassat demuestra la fascinación que ha experimentado por la obra de Arranz-Bravo desde que lo descubrió el año 1966 en una exposición en la galería Gaspar de Barcelona. Dibujos y pinturas de aquel momento muestran la transformación cromática y onírica de la obra de Arranz-Bravo en el marco de la Barcelona libertaria de final de los años 60 del siglo pasado.
También está representado el periodo de Cadaqués, una época en la que el artista se inició en la disciplina escultórica, o la pintura a partir de los 90, cuando Arranz-Bravo se instaló en Vallvidrera y orientó el trabajo artístico a una obra más íntima, introspectiva y apasionada de la pintura.
Lluís Bassat es uno de los coleccionistas más importantes de pintura contemporánea catalana, con un fondo que supera las tres mil obras, entre pintura, escultura, dibujo y grabado. Iniciada el año 1973, la colección se centra en la pintura y la escultura de la segunda mitad del siglo XX, en artistas como Josep Guinovart, Albert Ràfols Casamada, Robert Llimós o Rafael Bartolozzi. Desde el 2010, la colección se puede visitar en la Nave Gaudí de Mataró.
La exposición "Arranz-Bravo en la colección Bassat" está comisariada para Núria Poch y Albert Mercadé. Se puede visitar hasta el 24 de mayo.